Estrategias para recuperar a tus clientes
Todas las peluquerías y centros de estética experimentan alguna vez el problema de perder un estilista, y desafortunadamente, eso generalmente significa perder a clientes. La buena noticia es que, aunque podamos perder un estilista, no tenemos que perder ingresos ni clientes. Independientemente de por qué se va el estilista, existen estrategias para ayudar a recuperar a los clientes y mantener los ingresos constantes durante el tiempo de transición de personal. Estas son tres estrategias para ser proactivo/a, reactivo/a y hacer un esfuerzo extra cuando un empleado deja tu negocio.
Se proactivo
Sabemos que, en promedio, un peluquería o centro de estética perderá dos estilistas por año por varias razones. Sabiendo que esto es un hecho recurrente, es importante tomar un enfoque proactivo. La primera y más importante manera de ser proactivo es estar siempre contratando. Si queremos recuperar a los clientes de un estilista que se va, tenemos que tener estilistas que estén disponibles para atender a los clientes que necesitan un nuevo estilista.
En segundo lugar, debemos enseñar a nuestros clientes antes de que visiten nuestro peluquería o centro de estéticapor primera vez que hay más de un estilista en nuestro peluquería o centro de estéticaque es ideal para ellos. ¿Cómo hacemos esto? Dado que muchos de los visitantes de nuestro salón son nuevos clientes, ¿qué mejor manera de garantizar su fidelidad que ofrecerles participar en una encuesta que les muestre tus tres mejores estilistas? De esta manera, les estamos mostrando que hay varios profesionales que son muy buenos y ello, además, repercute de forma positiva para el equipo.
No solo debes alentar a los nuevos clientes a tener más de un estilista para elegir, sino que debes comenzar a alentar a los clientes existentes a probar a otros estilistas en tu salón. Una forma de hacerlo es proponer a tus clientes otro empleado cuando el que tienen habitualmente no tiene disponibilidad. Animando a nuestros clientes a probar otras opciones, estamos dejando de depender de un solo trabajador.
Se reactivo
No importa cuál sea el motivo, cuando un estilista abandona un salón, tienes que responder rápidamente. Lo más normal es que cuando esto ocurra, nos sentimos paralizados, nunca pensamos que esto nos podría pasar hasta que sucede. Inmediatamente, lo que debemos hacer es borrar al estilista de todos los aspectos del negocio, como nuestro software de gestión para la peluquería o centro estético New Style Elite, su correo electrónico, grupos sociales, etc. Luego, enviamos un correo electrónico a cada cliente que el estilista vio durante el año. En el correo electrónico, comunicamos la marcha del estilista y lamentamos la decisión que ha tomado. Prometemos igualmente seguir ofreciendo el mejor servicio y les pedimos que prueben otros estilistas en nuestro peluquería o centro de estética proponiendo el que creemos que se ajusta más a sus necesidades. Incluso les podemos decir que el nuevo estilista tiene otras ventajas (formación, estilo de corte, etc.) que mejoran al anterior.
Un esfuerzo extra
Además de estas acciones, siempre viene bien un último gesto que ayudará a que la pérdida del estilista sea más suave y no impacte en nuestra peluquería o centro de estética. Si todas las medidas anteriores no son suficientes, una buena recomendación es ponerse en contacto directo a través del teléfono con todos los clientes del empleado que se ha marchado (con nuestro programa de gestión para la peluquería o centro estético tendrás una ficha con toda su información de contacto). De ese modo, podemos explicar de primera mano lo que ha pasado y preguntarle al cliente si está dispuesto a volver pese a la marcha de su estilista de cabecera. Nos llevaremos una sorpresa muy positiva seguramente. El gesto de avisarles y proponerles una alternativa igual o mejor les ayudará a sentirse atendidos correctamente. Esto no significa que no podamos perder algún cliente, pero seguro que no es una marcha mayoritaria.
Otra acción que podemos tomar es internamente. Hablar con nuestros empleados frecuentemente y que nos expliquen cómo se encuentran, cuáles son sus inquietudes, puede ayudarnos a anticipar o incluso evitar una salida inesperada. Está claro que no podemos controlarlo todo, pero estas tres estrategias nos pueden echar un cable en un momento difícil como ese.