Nuevas restricciones europeas en cosmética
A partir de un nuevo estudio, la Comisión Europea ha restringido con carácter general el uso de conservantes antimicrobianos utilizados en productos cosméticos. Los conservantes se conocen como propilparabeno y butilparabeno y se agregan a los cosméticos con el fin de preservar las propiedades de estos.
El ejecutivo comunitario emprende estas acciones a partir de un estudio elaborado por un comité científico sobre la seguridad del consumidor. A partir de los resultados obtenidos, el comisario europeo de consumo, Neven Mimica comentó que “los conservantes en cosmética desarrollan una importante función al asegurar que los productos que usamos de manera diaria están libres de patógenos”. Continuó añadiendo que “necesitamos asegurar que esas sustancias garantizan el máximo grado de protección y con estas nuevas medidas los consumidores pueden estar tranquilos que sus cosméticos son seguros”.
La Comisión Europea también prohíbe el uso de estos conservantes en las toallitas para bebés, con el fin de aumentar la seguridad de los productos cosméticos y reducir riesgos para los consumidores.
Sobre esta línea, se prohibió también la mezcla de metil-cloro-isotiazolinona y metilisotiazolinona ya que permanecen bajo la piel, al igual que las cremas corporales.
En cuanto a los parabenos mencionados anteriormente, Bruselas ha acordado que la concentración máxima de ambas sustancias se reduzca hasta un 0,14%, sean o no utilizadas en cosméticos de forma separada o combinada con otros compuestos. Actualmente, el límite en el uso de estos conservantes está situado en 0,4% para el uso de forma individual, y en 0,8% para el uso combinado con otros compuestos.
Por otro lado, desde la Asociación Nacional de Perfumería y Cosmética -STANPA- se muestran satisfechos con la decisión de restringir el uso de conservantes en los cosméticos. Expresaron también que desean que “se acabe la enorme confusión” creada por los parabenos. Añaden además que “los cosméticos forman parte la vida cotidiana de las personas y por esta razón, queremos transmitir tranquilidad al consumidor sobre el uso seguro de los cosméticos que contienen parabenos, independientemente que cada compañía opte libremente por hacer formulaciones con estos u otros conservantes distintos. La industria cosmética está totalmente comprometida en ofrecer y garantizar la seguridad de los consumidores”.
Por su parte, la Comisión aseguró que los parabenos representan una parte importante de los conservantes que pueden utilizarse en la industria cosmética. Desde STANPA vienen recordando que la polémica por estos conservantes se arrastra desde 2004, y a partir de la publicación de un estudio de “escasa base científica”. Este estudio alertaba sobre la posible -aunque no probada- relación entre el cáncer en mujeres y los parabenos. Poco después de publicarse este estudio, diversas empresas del sector cosmético, así como parte de la comunidad científica e incluso la Asociación Estadounidense del Cáncer, trabajaron con el fin de encontrar alguna relación entre estos conservantes y la enfermedad, aunque tal y como se esperaba y contrariamente a lo establecido por el estudio, no encontraron relación alguna.
Finalmente hay que destacar que en el sector cosmético no se utiliza cualquier tipo de parabeno, ya que sólo están autorizados para su uso determinados conservantes que figuran en un dossier de seguridad aprobado por el Comité Científico de Seguridad de los Consumidores de la Unión Europea, compuesto por expertos y toxicólogos que velan por la seguridad de los consumidores.